En una isla marcada por su identidad única y su naturaleza indomable, The Goats ha sabido construir mucho más que un equipo: ha creado una familia, una comunidad y un símbolo deportivo para Fuerteventura. Con una base sólida, una dirección comprometida y un grupo humano apasionado por el softbol, este club se ha convertido en un ejemplo de lo que el deporte puede lograr cuando se combina con visión, trabajo y corazón.
Detrás del impulso de este ambicioso proyecto está Luis Martínez de Paula, más conocido en el terreno de juego y artístico como Jake Williams, quien no solo dirige, sino que también juega, lidera y representa a un equipo que ha sabido conquistar tanto el respeto de sus rivales como el cariño de su afición.
Del Caimán al liderazgo: el nacimiento de una nueva historia
Los orígenes de The Goats están marcados por decisiones valientes y un deseo de renovación.
“El equipo The Goats nació a raíz de la separación del equipo Caimán Verde. Muchos jugadores ya no querían formar parte de ese club. Junto a otros compañeros formamos Cubanos, pero con el tiempo ese equipo fue perdiendo energía. Fue entonces cuando decidí involucrarme de lleno y cambiarle el nombre”, relata Luis.
Ese cambio de nombre no fue casual. Refleja el deseo de reconstruir una identidad y generar una nueva motivación para el grupo.
“Estábamos buscando nombres entre todos. Nunca se me olvida cuando Fer dijo ‘The Goats’. Me encantó. Es perfecto para nosotros y representa muy bien a nuestra isla, ya que las cabras son una de las insignias de Fuerteventura”.
El nombre se convirtió en símbolo, y el símbolo en inspiración. Desde entonces, The Goats (Las Cabras de Fuerteventura) se ha consolidado como una fuerza emergente en el panorama del softbol canario.
Una alianza digital que impulsa el proyecto
La incorporación de The Goats a Numeritos de Canarias marcó un antes y un después en la gestión del equipo. Para Luis, el impacto es más que positivo:
“Significa una buena oportunidad para estar al día con los promedios, el pitcheo, las estadísticas… Numeritos desempeña una labor increíble al digitalizar toda nuestra información. Estamos contentísimos de formar parte de esta familia, que además es muy profesional y mantiene al público siempre actualizado”.
En un entorno deportivo que exige cada vez más visibilidad y organización, esta colaboración ha sido clave para consolidar la imagen del equipo y atraer el interés de otros clubes y seguidores.
Estilo, identidad y filosofía competitiva
Definir a The Goats en pocas palabras no es tarea fácil. Sin embargo, Luis lo resume con claridad:
“Nuestro estilo de juego es exclusivo y único. El nivel de nuestros jugadores es muy alto, aunque en este deporte siempre se aprende algo nuevo cada día”.
No se trata solo de talento, sino también de actitud. La disciplina, la constancia y el compañerismo son pilares fundamentales para este grupo que ha sabido crecer enfrentando retos importantes.
Entre sus metas destaca un calendario lleno de desafíos:
“Queremos ganar el torneo Leo Leal en Costa Adeje, llegar a la final de la Liga Federada Canaria y representar a Canarias a nivel nacional. Además, en agosto tenemos otro torneo donde intentaremos traer el trofeo a casa”.
Retos logísticos y éxitos tempranos
Uno de los mayores desafíos fue la participación en la liga federada durante 2024, que exigía constantes desplazamientos interinsulares:
“Cada fin de mes teníamos que viajar 21 jugadores federados a otra isla. Fue un gran reto, pero lo logramos. Disputamos la final en Gran Canaria en nuestro primer año”.
Ese esfuerzo colectivo no solo fortaleció al grupo, sino que también reforzó la idea de que, con voluntad y trabajo, todo es posible.
Una familia dentro y fuera del campo
Más allá de lo deportivo, The Goats es una verdadera familia. Así lo vive Luis, que destaca la implicación emocional del grupo:
“Todos los jugadores son especiales. Los considero parte de mi familia. Siempre estoy disponible para ellos, y ellos para mí. Me gustaría dar un reconocimiento especial a mis hermanos Yoilan, Pachy y Pedro, que me ayudan mucho cuando no puedo estar por temas laborales”.
Esa unión se refleja en el campo, donde la química del equipo es evidente en cada jugada y celebración.
Inspiración para las nuevas generaciones
La repercusión del equipo en la isla ha sido muy positiva. El softbol, un deporte aún en crecimiento, ha comenzado a llamar la atención de jóvenes curiosos y nuevas promesas.
“Muchos chicos que jugaban al fútbol ahora nos ven y sienten curiosidad. Hemos comenzado a despertar el interés de la nueva generación. Además, el apoyo del Cabildo, el Ayuntamiento de La Oliva, el alcalde y la Concejalía de Deportes ha sido clave para seguir creciendo”.
The Goats no solo compite, también siembra.
Softbol y música: pasión sin límites
Luis no es solo un dirigente comprometido. Su otra faceta, la musical, lo lleva a los escenarios bajo el nombre artístico de Jake Williams.
“Cuando tus dos pasiones van de la mano, siempre encuentras tiempo. Para mí no es ningún impedimento”.
Ese equilibrio entre el arte y el deporte ha sido parte de su éxito como líder de un proyecto que no se detiene.
El futuro: más deportes, más comunidad, más Fuerteventura
Luis sueña con expandir la marca The Goats más allá del softbol:
“Me gustaría que no solo existiera The Goats Softbol, sino también equipos de baloncesto, fútbol u otras disciplinas deportivas”.
Con un espíritu comunitario fuerte, el equipo también busca reforzar la competencia local. Actualmente participan en la Liga de Softbol Modificado y disputan amistosos semanales:
“Intentamos jugar lo máximo posible. En el futuro queremos organizar nuestra propia liga aquí en Fuerteventura y lanzar un gran torneo en septiembre”.
Sobre el inminente desafío internacional en Adeje, Luis es claro:
“Entrenamos martes y jueves, y luego aplicamos todo en los partidos amistosos. Nuestro objetivo es clasificar a la semifinal y luego luchar por la final. Ese torneo será clave para medir nuestro verdadero nivel”.
Un mensaje final para toda Canarias
Para cerrar, Luis deja un mensaje claro y sincero para todos los que siguen a Numeritos de Canarias y se acercan por primera vez a conocer al equipo:
“Nada, mi gente, espero que sigan disfrutando de nuestros juegos y que nos sigan apoyando como club. ¡Se les quiere! THA GOATS”.